- 6 de septiembre de 2016
Trabajar fuera de la oficina es más productivo que hacerlo dentro
Informes y estudios apuntan que la mayor parte de los teletrabajadores afrontan proyectos con la cobaloración de otros coworkers, y lo hacen de una forma más productiva que desarrollando el trabajo en la oficina. Además, dichos equipos suelen aprovechar mejor el trabajo, ya que son más efectivos, flexibles y se relacionan de una forma diferente.
Más flexibilidad en el horario de los trabajadores suele traducirse en mejores resultados en sus proyectos, si se compara con sus compañeros que trabajan de manera presencial. Es la idea que defienden desde la red social corporativa Social Shared. "Ir al trabajo ya no supone acudir a la oficina", explica José Luis Sánchez, confundador y CEO de la compañía.
No solo eso: "conllevará una nueva relación entre empleado y empleador, que implicará muchas y nuevas oportunidades para ambas figuras, asegura Sánchez. "Se trata de mucho más que teletrabajo", concluye.
Pero aunque hay gente que duda del rendimiento de una persona trabajando desde casa, o desde un espacio de trabajo compartido fuera de la empresa, lo cierto es que los teletrabajadores aumentan su productividad entre un 5% y un 25% respecto a los presenciales, según el INE. Incluso el teletrabajador cuenta con un mayor compromiso con la empresa y gestiona y aprovecha mejor su tiempo, ya que no depende de unos horarios, sino del volumen de trabajo o proyectos asignados.
Recuerdan desde Social Shared que, en el caso de los equipos que trabajan a distancia, es recomendable priorizar la organización y la comunicación entre los miembros, para conseguir que las relaciones sean fluidas. Además, es conveniente recurrir a herramientas de trabajo, como redes sociales corporativas, que permitan gestionar conjuntamente proyectos y asignar tareas entre trabajadores, proveedores e incluso clientes desde cualquier sitio. Según indican desde la compañía, las herramientas colaborativas brindan al teletrabajador la oportunidad de "no perderse nada" y poder participar en cualquier puesta de ideas, videoconferencia o evento.
FUENTE: EL ECONOMISTA